EL ZORZAL

Desde un tiempo a esta parte venimos observando por los que de vez en cuando "andamos" a zorzales, que estas aves están tomando otras querencias.

Recuerdo los primeros años en los que empecé a cazar, hace unos 20 años, aquellas tiradas de tarde en el Regato Jardín, en el Corchito, en Val de Borregos o en los Agachados, tiradas en las que era frecuente, que el zorzal entrara en bandos de 50 ó 100 pájaros, poniendo a prueba los caños de las escopetas que quemaban con sólo tocalos. Por aquellos tiempos, era fácil hacer perchas de 30 ó 40 individuos en sólo una hora de paso. Se notaba la poca presión cinegética, el poco interés que todavía despertaba la especie y sobre todo, que había por millares.

Recuerdo además, que en una ocasión en el Corchito, abatimos un zorzal con una anilla en la que estaba grabado el país de Luxemburgo; aquella pequeña ave, por la que empezaban a venir cazadores extranjeros al pueblo, había recorrido miles de kilómetros. Pero eso sólo son recuerdos.

Después del año pasado, malísimo por estos lares en cuanto a zorzal, parece que este año se ven bastantes más, eso sí, sin llegar ni de lejos a situaciones pasadas.

Lo curioso, es que vas por el monte, y se levanta mucho zorzal, pero por las tardes, apenas pasan en los pasos tradicionales de siempre. ¿por qué?

Pues dicen los que "entienden" del tema, que cada vez se ven menos alirojos, que precisamente son los que más se desplazan de los comederos a las zonas de dormida y viceversa. Otros dicen que pasa menos zorzal porque la presión cinegética es cada vez mayor, no se respetan los cupos y que por lo tanto hay muchos menos. Y hay otra gente que piensa que no es que haya menos, sino que ese cambio de hábitos es debido precisamente a esa presión cinegética en las zonas de pasos a los dormideros y que los pájaros aprenden.

 

Sea como sea, esperemos que algún día se respeten los cupos y la especie vuelva a ser tan abundante como antes.